En mi caso, cada vez que decidimos hacer una escapada y decido viajar con perros preparo la ruta que quiero hacer, echo un ojo a la normativa del lugar, busco a los veterinarios de la zona y, como todo humano, busco alojamiento para mí y mis cuatro perretes.
Tanto mi maleta como la de mis peludos se prepara en función del lugar y el clima a donde vamos, pero siempre hay cosas básicas que viajan con nosotros como el neceser, cartillas sanitarias, los arneses y las correas.
Puede sonar atípico, pero no es lo mismo viajar en verano, en invierno, hacer rutas en un bosque nevado o ir a la playa.
Lo primero que equipamos es el coche. Nosotros viajamos con 4 perros y la tapicería la protegemos con una lona impermeable; es muy fácil de instalar ya que se engancha a los cabezales delanteros y traseros. Vienen preparadas con unas ranuras que se adaptan a los anclajes del cinturón y así podemos llevarlos atados y sin riesgos de que quieran saltar a los asientos delanteros. La única que viaja en trasportín es Meimei (la Shitzu).
Otros accesorios que nunca faltan en mi coche son los cinturones de seguridad para perros, garrafa de agua, bebederos, un par de toallas y la jaula plegable.
En la maleta perruna pongo:
- Neceser: Cepillos, peines, carda y coat. Como tengo 4 perros y cada uno de ellos con el pelo muy distinto, añado también un quita nudos y una mascarilla sin aclarado.
- Toallitas húmedas. ¡Imprescindibles!
- Toallas de secado rápido.
- Cuencos para comer y beber.
- Arnés, correa y bolsas para los excrementos.
- Botiquín
- Trasportín, jaula y colchoneta para dormir
- Comida (pienso y latas).
- Ropa (abrigo, chubasquero, botas)
- Mochila de senderismo
- Alforjas
- Juguetes

Notaperruna: Se cívico y no dejes la suciedad allá por donde pases con tu perro, ya sean calles, parques caninos o playa. Si todos damos ejemplo, aumentaremos las posibilidades de ser bienvenidos y que nos acojan sin prejuicios.
Las bolsas para las cacas también se pueden usar para improvisar un bebedero o unas botas para la nieve.
¿Por qué utilizo todo esto?

Cinturón de seguridad: Tu perro viajará seguro y tu tranquilo. El perro tiene la libertad de poder moverse, pero no de saltar a los asientos delanteros y aparte, es obligatorio llevarlos atados.
Comida: Yo suelo llevarme como mínimo la comida para el primer día y dependiendo de los días que vaya a estar, me planteo comprarla cuando llego a mi destino. A veces no compensa llenar el maletero con sacos de pienso.
Botiquín perruno: Nunca suele pasar nada, pero en mi caso lo habitual es que Obelix y Meimei se enzarcen y el pelo se les quede enredado con pinchos. Alguna vez también he tenido que echar mano del corta hemorragias para uñas y el reparador de almohadillas.
Toallitas húmedas: Con más frecuencia de la que quisiera Meimei se mete en la playa, charcos, barro etc…, y ahí mi princesa parece una vagabunda, ¡Que da asquito tocarla! Las toallitas húmedas me van muy bien para adecentarla y repasar sus oídos. Cuando la tengo prácticamente seca, la pulverizo con su acondicionador, un cepillado y ya dan ganas de comérsela a besos.
Cuenco plegable de plástico: Es un accesorio que siempre viaja conmigo; no me gusta que mis perros beban donde beben otros perros por miedo a contagios y en las fuentes públicas, por respeto a los humanos y los escrúpulos que muchos tienen, tampoco les dejo amorrarse.
Toallas de secado rápido: Si tu perro es como los míos, que les encanta bañarse en la playa, la toalla es un básico que no puede faltar en tu maleta. Yo siempre llevo un par como mínimo porque son pequeñas, pero muy absorbentes.
Los Kong y sus mordedores: Aunque suelen llegar agotados o en verano que salimos tarde a pasear, los tengo entretenidos un buen rato. A veces les pongo comida congelada y disfrutan doblemente.
También puedes necesitar…
Transportin: Lo ideal es que acostumbres a tu perro desde que es cachorro a usar el trasportín y que lo vea como un lugar seguro y donde se sentirá protegido. Es una herramienta muy útil tanto para viajar como cuando tenemos que ir al veterinario.
Jaula plegable: Al igual que el transportín en mi casa, mis perretes duermen y comen ahí. Cuando llego a mi destino es muy cómodo y rápida de montar y ellos reconocen su camita.
Correa larga: La empecé usando para enseñarles a acudir a la llamada y ahora me resulta muy practica en esos lugares donde quieres darles libertad y estar seguro de que no se harán daño.
Correa adiestramiento: Es muy útil ya que la puedo alargar y acortar en función del paseo y del lugar donde estemos.
Ropa de invierno o verano: Si viajas en invierno y, sobre todo, si tu perro es de pelo corto como Leo o Lola, es importante que lleves un abrigo impermeable para que no pase frío y para protegerle de la lluvia. Si por contra es verano, sus mejores aliados son los accesorios refrigerantes.
Alforjas: Este accesorio es perfecto para perros grandes como mi Obelix, que es el encarado de cargar con ellas. En un lateral suelo poner los cuencos de comida y el neceser y en el otro el botiquín. Le gusta llevarlo porque se siente útil. Viene muy bien para las excursiones al campo o para hacer senderismo por la montaña.
Mochila de senderismo: mi mochila tiene un accesorio para poder almacenar dos litros de agua, va muy bien y me salva de muchos apuros: no siempre encontramos fuentes o agua potable tan rápido como nos gustaría. Los bocatas los llevo yo…, no me fío de estos cuatro.